A veces ocurre que cuesta ver el fruto del esfuerzo ahorrador. En ocasiones esto puede deberse a que somos excesivamente cortoplacistas, cuando el proceso de ahorro es algo que ofrece todo su potencial en el medio y largo plazo.
Sin embargo, también puede ser resultado de errores en los que caemos inintencionadamente. Ahorrar es algo más que acumular dinero. Debemos tener en cuenta variables de gran importancia, como el plazo temporal del que disponemos, el riesgo que podemos asumir o el producto más adecuado para canalizar nuestro ahorro.
Toma nota de estos consejos para evitar incurrir en errores frecuentes en el proceso de ahorro. Y recuerda que las claves son planificación, constancia y asesoramiento personalizado.