Accede al microsite con los datos de la IV Encuesta de Pensiones y Hábitos Ahorro 2016
Nueve de cada diez españoles afirman que la responsabilidad de que las pensiones de jubilación de la Seguridad Social sean suficientes en el futuro corresponde al Estado. Así se desprende de la IV encuesta BBVA sobre las pensiones y los hábitos de ahorro en España. Es decir, existe el convencimiento generalizado de que la responsabilidad sobre las Pensiones Públicas en España corresponde al Estado, mientras que en paralelo pierde fuerza la referencia al ciudadano como “responsable” de que en el futuro esas pensiones públicas sean suficientes (un 29% lo suscribe frente al 37% que lo suscribía en la tercera edición de la encuesta realizada en 2015). La percepción de responsabilidad de las empresas en este fin también disminuye, situándose en el 36% frente al 44% que arrojaba la tercera edición de la encuesta.
Son los trabajadores más jóvenes los que atribuyen más responsabilidad al ciudadano y menos al Estado. Por el contrario, los mayores de 45 años afirman en mayor medida que la responsabilidad corresponde al Estado y en menor medida que corresponde al ciudadano. Por género, apenas existe diferencia: el 89% de los hombres (91% de las mujeres) atribuyen la responsabilidad al Estado. El 30% de los hombres (29% de las mujeres) atribuye la responsabilidad al ciudadano. Y el 34% de los hombres (38% de las mujeres) atribuye la responsabilidad a la empresa.
Resultados por Comunidades Autónomas
- La responsabilidad es del Estado: a esta afirmación responden en mayor medida navarros (96%), cántabros (95%) y baleares (94%). En el otro lado de la balanza, castellanomanchegos (85%), canarios (87%) y aragoneses (88%).
- La responsabilidad es del ciudadano: castellanoleoneses (38%), gallegos (34%) y castellanomanchegos (33%) son los que más apuestan por esta afirmación. Los que menos, melillenses (21%), ceutíes (24%) y madrileños (25%).
- La responsabilidad es de la empresa: Los que se decantan en mayor medida por esta aseveración son asturianos (48%), castellanoleoneses (46%) y vascos (39%). Los que lo hacen en menor medida son melillenses (15%), aragoneses (32%) y catalanes y murcianos (33%).
Lo que dicen las proyecciones a futuro
España ha mostrado y muestra una gran confianza en su sistema público de pensiones. De hecho, es a día de hoy uno de los más generosos en términos de cuantía de la pensión en relación al último salario, un parámetro que se conoce como tasa de sustitución. En nuestro país se encuentra en niveles superiores a un 75% mientras que la media europea es inferior al 45%. Además, existe una importante particularidad: el sistema de pensiones en España se apoya de forma casi exclusiva en lo que se denomina “primer pilar”, es decir, la Seguridad Social, mientras que en otros países los sistemas complementarios están mucho más desarrollados y el mix de ingresos en la jubilación está mucho más repartido entre pensión pública y ahorro complementario.
Las perspectivas a unas pocas décadas vista en España auguran un descenso importante en la generosidad de la pensión pública, pudiendo situarse la tasa de sustitución en niveles del 50% en un plazo de dos o tres décadas. Esto quiere decir que los trabajadores actuales que se vayan a jubilar hacia mediados de siglo van a tener que asumir un mayor protagonismo en el bienestar de su jubilación. La pensión pública ya no será suficiente para disfrutar de una jubilación desahogada, algo que pasará inexorablemente por la capacidad que tengan los futuros jubilados de complementar dichos ingresos. Y esa capacidad debe ser generada a lo largo de toda la vida laboral. Ahorrar para la jubilación pasará a ser una necesidad de primer orden.
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