La jubilación es una importante etapa de la vida. Desde el punto de vista económico, porque debe ser muy bien planificada para no pasar apuros en un momento tan vulnerable de la vida, en el que conseguir nuevas fuentes de ingresos es realmente complicado. Pero no es menor importante planificar la jubilación dese el punto de vista vital, entre otras cosas porque se trata de una fase cada vez más larga en la vida de las personas: a mediados de siglo, una jubilación media se prolongará 20 años, casi un cuarto de la vida de un individuo.
Uno de los cambios sociales más destacados entre los jubilados españoles es el incremento en la tendencia a vivir solos durante la jubilación, en unas tasas aún alejadas de las de otros países, pero en constante aumento. Según el INE, el 23,9% de los hombres españoles, y el 40,2% de las mujeres españolas viven en un hogar unipersonal. Pese a esto, en España y, en general en los países meridionales, el contacto entre distintas generaciones de la familia es mayor que en los países del centro y norte de Europa. La familia desempeña funciones de solidaridad que en otros casos se atribuyen al ámbito de la protección pública.
Los países en los que más se desarrolla este contacto entre generaciones son Italia, Grecia y España. Los países en los que los mayores de 65 años tienen menor contacto con sus hijos con Suecia, Dinamarca y Bulgaria, según un estudio de Eurofound.
En España, mas de la mitad de los mayores de 65 años ven a sus hijos con una frecuencia diaria o prácticamente diaria. En Suecia, por ejemplo, menos del 20% de los mayores tiene esta frecuencia de contacto y casi el 20% ve a sus hijos menos de una vez al trimestre.
Otro indicador en el que España destaca es en el de la esperanza de vida, con uno de los mejores registros a nivel mundial, gracias a su clima, dieta, modo de vida y sistema sanitario, entre otros. Según un estudio de la OCDE, un hombre español que accediese a la jubilación en 2014 viviría, en media, 20,4 años. En el caso de una mujer, colectivo más longevo, serían más de 23 años. Para ponerlo en perspectiva, esta esperanza de vida en los países de la OCDE es, en media y respectivamente, de 18 años y de 22 años.
¿Son felices los jubilados españoles?
Teniendo en cuenta que definir la felicidad es un objetivo complicado, dado que cada individuo la concibe de una forma diferente y en base a factores muy variados, los españoles se consideran bastante felices en comparación a países del entorno y en una posición superior a la media de los demás países europeos, según la European Social Survey de 2012. Los mayores de 65 años se consideran a sí mismo ligeramente más felices que los menores de 65 años, en una escala de cero a diez en la que cero significaría “absolutamente infeliz” y 10 “absolutamente feliz”.
