1. Pasamos de certeza a las expectativas “La difícil decisión de invertir en un contexto de riesgo”
Los tiempos de rentabilidades ciertas han terminado.
2. Debemos aprender a convivircon el riesgo “Nos toca pasar al otro lado: entender y manejar los riesgos”
Los productos sin riesgo no ofrecen rentabilidades atractivas.
3. La gestión activa toma más valor “Se acabó el momento de sentarse y esperar”
La gestión activa implica un continuo ajuste de los valores que componen nuestra cartera.
4. Es importante conocerse bien “Analizar con microscopio e invertir con telescopio”
5. El asesoramiento es la clave “A cada ahorrador, su estrategia de ahorro”
6. Estableciendo objetivos de largo plazo “Pasamos de ser sprinters a corredores de fondo”
7. Debemos ahorrar para el futuro “No solo el aquí y ahora como forma de entender la vida”
Los tipos bajos y la creciente longevidad imponen un enfoque de largo plazo en nuestro ahorro.
8. Buscando generar rentas periódicas “Para complementar nuestro día a día y nuestra jubilación”
En momentos de incertidumbre de mercado, la liquidez que las rentas del ahorro aportan a las carteras se convierte en un factor muy importante que transmite tranquilidad.
Echa también un vistazo a la infografía sobre Rentabilidades en el largo plazo: Implicaciones para los activos
9. Sin olvidar la disciplina del ahorro “Tacita a tacita”
El éxito reside en darle a la inversión el tiempo que necesita para crecer.
10. La ecuación básica de nuestras finanzas ha cambiado “¿Qué es ahorrar?: cambiar consumo presente por consumo futuro”
El nuevo paradigma del ahorro: Ingresos – Ahorro = Gastos.
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