En este artículo vamos a enumerar algunas de las soluciones más interesantes respecto de la luz, el agua y los electrodomésticos gracias al portal inmobiliario Anida
Ahorrar en el uso de la luz
Lo primero es ajustar nuestro contrato de la luz a la potencia que necesitamos. Las potencias más frecuentes en las viviendas son las de 3,4 KW para viviendas de más de 50 m2 pero con bajo consumo energético; las viviendas de 100 m2 con consumo intenso de energía suelen tener contratados hasta 5,75 KW.
¿Cómo saber si debo cambiar la potencia contratada? Conecta todos los electrodomésticos y bombillas si no salta el ICP (interruptor de control de potencia), lo que vulgarmente llamamos los plomos es que puedes bajar un escalón por ejemplo de 5,75 KW a 4,6 KW.
Otro ejemplo de ahorro son las bombillas. Las recientes bombillas LED consumen un 90% menos que las bombillas incandescentes y un 65% menos que las fluorescentes de bajo consumo.
Ahorrar en el uso del agua
Por obvio que parezca la mejor medida es cerrar el grifo. Pero existen también otras medidas que contribuyen a utilizar menos agua. Los grifos termostáticos reducen hasta un 16% el consumo de agua al eliminar el ajuste de temperatura, en la ducha los reductores de caudal consiguen ahorrar hasta un 50%. También procura darte una ducha en lugar de bañarte, se ahorra hasta cinco veces más.
Comprar inodoros con un sistema de cisterna de bajo consumo permite ahorrar hasta 23 litros por descarga. A su vez, las lavadoras también son un foco al que prestar atención: si ponemos un programa corto podemos ahorrar más de 100 litros en cada lavado.
Si quieres ver las comunidades españolas donde se usa menos agua revisa esta infografía del portal inmobiliario Anida.
Ahorrar en el uso de los electrodomésticos
Hoy en día tenemos más electrodomésticos en casa que en ningún otro momento anterior de nuestras vidas. Frigoríficos, televisiones, lavadoras, lavavajillas, ordenadores, etc. Todos ellos además de facilitarnos la vida diaria consumen electricidad y, por tanto, son una fuente de gasto diario. Con estos sencillos consejos podremos reducir su consumo y así ahorrar dinero en la factura de la electricidad.
Frigoríficos. Por término medio consumen más de 650 KWH. Para ahorrar tienes dos opciones interesantes. Justo en el momento de compra del frigorífico tienes que evaluar el uso real que le vas a dar, es decir: si es para una sola persona, una pareja, una familia con hijos o familia numerosa y en función de ello la capacidad del electrodoméstico expresado en litros. Lo ideal es que para una persona o una pareja el frigorífico sea de 100-150 litros de capacidad. Para el aso de una familia será superior a los 200 litros y para una familia numerosa más de 250 litros. Ten en cuenta que por cada 100 litros se incrementa el consumo unos 10 KWH al mes. Esto supondría casi un euro y medio al mes. Si lo puedes ahorrar no lo dudes, hazlo.
Una vez comprado el frigorífico y ya instalado en tu domicilio regula la temperatura con el termostato que viene incluido en el mismo. En verano, posiblemente, necesite más potencia mientras que en invierno menos. Revisa que la comida y la bebida que tengas dentro de él no se quede congelada sino que esté fresca y bien conservada, de esta manera estarás optimizando el consumo de energía.Por último, dejar bien cerrado el frigorífico, apagarlo si prevemos que estaremos fuera de la casa un tiempo prolongado
Lavadoras. Cuando vayas a elegir una lavadora ten en mente que siempre tenga un ciclo económico lo que quiere decir que tendrá menor consumo de agua y electricidad. A su vez, revisa el manual de tu lavadora y busca siempre utilizarlo en carga completa y lavado rápido. Respecto del centrifugado que no supere los 900 o 1000 RPM ya esto haría que saliera prácticamente seca la ropa. Si buscas que tenga secadora en esos niveles de revoluciones por minuto.
Lavavajillas. ¿Cómo reducir hasta un 50% el consumo? Eligiendo un modelo de lavavajillas que tenga ciclo de frío y económico. Procura que tenga una carga completa antes de ponerlo en funcionamiento.
El ‘stand-by’ o modo ‘en espera’. No es suficiente con no usar los electrodomésticos para no gastar, si podemos desenchufarlos de la corriente eléctrica, mejor. Por término medio el consumo de los aparatos en reposo es de 230 KWH lo que equivaldría ¡al consumo anual de un ordenador! Si los desenchufamos podremos reducir el consumo hasta en 100 euros al año. Por ejemplo, la televisión, el ordenador o el vídeo.
