BBVA Mi jubilación - Fondo documental

To help countries to improve asset-backed pension systems and build people’s trust that their best interest is considered, the present edition of the OECD Pensions Outlook provides a series of recommendations on how to introduce, develop and strengthen asset-backed pension arrangements, the role that employers can play in the development of these arrangements, how fees can be charged to protect retirement assets and align them with the cost of the services provided, how to ensure the appropriateness of mortality assumptions, and the design and introduction of non-guaranteed lifetime retirement income arrangements.

La edición 2020 de Pension Markets in Focus ofrece una descripción general de los ahorros para la jubilación a fines de 2019 en 90 ámbitos geográficos así como describe los desarrollos en el sector de las pensiones en todo el mundo. El informe presenta una amplia gama de indicadores relevantes para los ahorros para la jubilación, armonizados y estandarizados en todos esos ámbitos geográficos. Igualmente, supervisa los aspectos financieros clave, como la cantidad de activos acumulados, la forma en que se invierten estos activos y el rendimiento de sus inversiones, tanto durante el último año como a largo plazo. El informe también examina la proporción de la población cubierta por planes de pensiones, el monto de las contribuciones pagadas a estos planes y los beneficios que reciben los afiliados al jubilarse.

Los datos preliminares para 2019 muestran que los recursos mantenidos en planes de pensiones abarcan los 32,3 trillones de dólares en el área de la OCDE así como otros 0,7 trillones en otras 29 jurisdicciones estudiadas. Los Estados Unidos centralilzan la mayor cantidad de actives en fondos de pensiones al finalizar 2019 (18,8 trillones), seguidos por el R. Unido (3,6 trillion), Australia (1,8 trillion), los Países Bajos (1,7 trillones), Canadá (1,5 trillion), Japan (1,4 trillion) y Suiza (1,0 trillion). Estos 7 países comprenden más del 90% de los activos mantenidos en fondos de pensiones en el área de la OCDE.

La crisis de COVID-19 ha dejado al descubierto vacíos y brechas preexistentes en los mecanismos de protección social. A medida que aumentó el número de trabajadores enfermos, otros redujeron sus horas de trabajo o incluso perdieron empleos, las licencias retribuidas por enfermedad, los planes de trabajo de corta duración y las prestaciones por desempleo se han implementado. Ésto ha ayudado a mantener los ingresos de muchos, pero incluso en países con la protección social más avanzada, algunos trabajadores con trabajos no estándar y sus familias se ven descolgados. La situación es peor en países con grandes sectores informales donde un número creciente de personas pierde trabajo sin acceso a nuevos ingresos. Este informe analiza las medidas de política que los países han tomado para apoyar los medios de vida de aquellos que no pueden acceder a las ayudas por desempleo o a planes de trabajo a corto plazo. Examina la gran cantidad de nuevos programas introducidos en toda la OCDE, y más allá, que incluyen asistencia de recursos efectivo, nuevos esquemas de transferencias monetarias y apoyo directo para aquellos que luchan por cubrir sus gastos. También se analiza cómo cerrar las brechas de protección social más allá de la crisis para garantizar un crecimiento inclusivo después de COVID-19.

Esta octava edición de Pensions at a Glance proporciona una gama de indicadores para comparar las políticas implementadas en materia de pensiones y sus resultados entre los países de la OCDE. Siempre que sea posible los indicadores examinados se proporcionan, además, para las principales economías del G20. De entre el contenido del estudio, tres capítulos son especialmente interesantes en tanto proporcionan un análisis más profundo de las recientes reformas llevadas a cabo desde esta perspectiva (Capítulo 1) así como del funcionamiento de los sistemas de pensiones dentro de los países de la OCDE para individuos en formas de trabajo no convencionales (Capítulos 2 y 3).

El nuevo informe de la OCDE afirma que las mejoras en el diseño de los sistemas de pensiones realizadas durante la última década en los países de la OCDE aumentaron su sostenibilidad financiera y ahora los gobiernos deberán centrarse en velar por que proporcionen a las personas un ingreso de jubilación adecuado. En el OECD Pensions Outlook 2018 se sostiene que los gobiernos afrontan retos como el envejecimiento de la población, bajos rendimientos de los ahorros para el retiro, bajo crecimiento, menor estabilidad en las carreras profesionales e insuficiente cobertura de pensiones entre algunos grupos de trabajadores. Estos problemas han erosionado la confianza en que los sistemas de pensiones, bien sean de reparto o de capitalización, cumplirán sus promesas una vez que los trabajadores lleguen a la edad de jubilarse. Muchos países han puesto en marcha mecanismos automáticos para ajustar las prestaciones de pensión a la evolución económica y demográfica, así como opciones predeterminadas para ayudar a quienes no desean o no pueden elegir. Asimismo, los países han tomado medidas para fortalecer las redes de seguridad con el fin de evitar la pobreza en la vejez, dice el reporte. Por su parte, los reguladores y los responsables de formular políticas públicas también han emprendido acciones para afianzar los marcos regulatorio y de supervisión de los planes de pensión de capitalización con miras a garantizar que gestionen los ahorros de la población para su mayor beneficio.